El alma más auténtica de Lecce entre paseos en bicicleta, clases de cocina y comida casera
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El calor asfixiante del verano ha quedado atrás, pero todavía hay sol y un calor agradable para disfrutar junto al mar. El otoño es la estación perfecta para descubrir el alma más auténtica de Lecce, una ciudad asombrosa en la que puedes dedicarte a realizar las más diversas actividades, como clases de cocina, suculentas comidas caseras y excursiones en bicicleta.
Esto es lo que puedes hacer en Lecce en otoño
Smart Working con vistas al mar
¿La jugada más inteligente? Elegir Lecce como destino de trabajo inteligente durante los meses de otoño.
Vista al mar garantizada, donde se te hace la boca agua.
Los que tengan la oportunidad de trabajar a distancia pueden disfrutar de los últimos rescoldos del verano y del dulce otoño meridional sin las aglomeraciones de julio y agosto. Cárgate con un ordenador y todo lo que necesites para trabajar: solo tienes que respirar a pleno pulmón y disfrutar de la vista que tienes ante ti.
A la caza del mejor café de Lecce
Alquila una bicicleta para buscar el mejor café de Lecce mientras pedaleas entre iglesias barrocas y deslumbrantes calles blancas.
Siéntate en la mesa de un café en una plaza y disfruta del descanso charlando con los vecinos para disfrutar de la belleza y de las historias de su vida. Cambia de lugar todos los días para probar el café de Lecce en cada bar, y elige tu favorito al final de la estancia.
Disfrutando de un paseo en bicicleta por Lecce
La mejor manera de moverse por la ciudad durante el otoño es, sin duda, la bicicleta, una forma estupenda de estirar las piernas después de pasar horas en el PC entre llamada y llamada, y poder desplazarte rápidamente mientras disfrutas del paseo.
Un consejo: empieza por la catedral de Lecce y su plaza, entre las más bellas de Italia, y dirígete a la entrada monumental de la ciudad, Porta Napoli, y luego a la Basílica de la Santa Cruz, un magnífico ejemplo del barroco de Lecce. A continuación, ve a la plaza de Sant'Oronzo para sumergirte en el pasado, admirando su teatro romano.
En la mesa, los relatos de los de Lecce son imprescindibles
El paseo en bicicleta da hambre. Es el momento de sentarte a la mesa y descubrir los productos típicos del Salento.
Los habitantes de Lecce te deleitarán con las especialidades locales, abriéndote, literalmente, la puerta de su casa. Siéntate a la mesa y disfruta de su compañía, valorando tu tiempo libre enriquecido con el atractivo de esos encuentros humanos.
Para añadir a la lista de cosas por hacer: curso de cocina
Si no te basta con comer, sino que quieres aprender también a hacer en casa todo lo que hayas probado durante tu estancia en Puglia, sólo tienes que inscribirte en uno de los numerosos cursos de cocina de Lecce.
Primero hay que ir a comprar al mercado para abastecerte de todos los ingredientes necesarios y luego… ¡manos en la masa!
Primer paso: aprender a hacer pasta casera, empezando por las “orecchiette” (orejitas). También podrás descubrir cómo cocinar el pescado a la perfección y cómo hacer un risotto perfecto o incluso un bocadillo gourmet con combinaciones originales. Mientras se prepara un almuerzo perfecto del Salento, puedes disfrutar también de un buen vino local. La pausa entre una actividad culinaria y otra se cubre siempre con el inevitable café de Lecce.
El otoño reúne la verdadera esencia del Salento en una concentración de actividad y tranquilidad, ofreciendo a quien nos visita buena comida, relajación y movimiento.
