Las islas Tremiti también reciben visitantes en invierno, entre pesca y paseos en kayak

Las islas tienen conexión con la península todo el año. Los ferris e hidroplanos salen de Termoli en Molise, de Peschici, Rodi Garganico, Vieste y Bari en Puglia y de Vasto en Abruzzo, y llegan a los dos puertos principales de las islas, San Domino y San Nicola.

Para desplazarse entre las dos islas mayores, o para llegar a los otros islotes, se puede usar el servicio de barco taxi o alquilar un barco, una lancha o un kayak.
No está permitido desembarcar y circular por las islas en moto o en coche porque se puede llegar a cualquier sitio fácilmente a pie o en barco.

Las Islas Tremiti son cinco, están enclavadas en las aguas del bajo Adriático frente al Parque Nacional del Gargano y forman parte de un área marina protegida que custodia un mar aún prístino. Cuenta la leyenda que fueron creadas por el héroe homérico Diomedes y ofrecen paisajes impresionantes para recargar las pilas a mediados del invierno.

Las islas más grandes de San Domino y San Nicola están habitadas, mientras que Cretaccio, Capraia y Pianosa están desiertas. A excepción de Pianosa, más lejana, todas están a poca distancia y pueden visitarse en un solo viaje. Para disfrutarlas al máximo, organiza una estancia de tres o cuatro días. ¿Tienes poco tiempo? Disfruta de lo esencial con una excursión en barco de un día entre las distintas islas.

La mejor época para hacer una excursión por las Islas Tremiti es de octubre a marzo, cuando el ajetreo turístico del verano deja paso al ritmo pausado de los isleños que viven aquí todo el año.

Qué ver en las islas Tremiti en invierno.

La ciudad más grande de Tremiti está en San Domino, donde hay bares, restaurantes y hoteles. Aquí también tenía su casa el cantautor Lucio Dalla, cuyos versos se escuchan por aquí y por allá al pasear por las callejuelas del centro.

A pocos pasos del puerto se encuentra la única playa de arena, cala Arena. Pero el corazón de la isla es el bosque de pinos de Alepo, que se extiende hasta el mar. Toma la carretera del pinar hasta Punta del Diavolo, donde se encuentran los restos del antiguo faro. Desde aquí las vistas son impresionantes.

Los acantilados están salpicados de numerosas cuevas. La más bella es la cueva del Buey Marino, de 70 metros de profundidad y de color azul por la luz que se refleja en su interior. Reserva un paseo en barco por el puerto para descubrir la cueva de las Violetas, la cueva del Cocodrilo y la roca del Elefante.

El núcleo histórico de San Nicolás está custodiado por el Santuario de Santa Maria a Mare, una imponente abadía benedictina que se alza sobre la isla. Al parecer, fue fundada por un ermitaño en el año 312 d. C. y en el siglo XI llegaron los benedictinos.

Está rodeado por el Castillo de Badiali, construido por Carlos de Anjou para proteger el santuario. Pasea hasta el cementerio en el extremo opuesto de la isla para disfrutar de unas vistas inigualables.

Cretaccio es más una roca que una isla y debe su nombre a la arcilla amarilla de la que está compuesta. Capraia también se conoce como Capperaia, porque allí crecen muchas alcaparras. Está deshabitada y está prohibido desembarcar, pero se puede parar a poca distancia de la orilla para ver la estatua sumergida del Padre Pío.

Pianosa es la isla más distante del archipiélago. Se encuentra dentro de la Reserva Marina Integral, por lo que a menos de 500 metros de la isla no se puede navegar, desembarcar o pescar. Se permite bucear acompañado de un guía autorizado, algo que merece la pena, pues los fondos son espectaculares.

Una excursión en barco es la mejor manera de disfrutar de las islas desde el mar. Se parte del puerto de San Domino, solicitando el acompañamiento de un barco taxi o alquilando un barco o una lancha neumática, con o sin conductor. Se navegan todas las islas, parando en los lugares más bellos o entrando en las cuevas.

A dos pasos del puerto de San Domino se encuentra Cala Arena, accesible a pie y también apta para niños. Pero a las playas más bonitas de las Islas Tremiti se puede llegar por mar.

En San Domino, haz una parada en cala Matano, cala dello Spido, cala dei Benedettini y playa dei Pagliai. La playa de Marinella es la única de la isla de San Nicola. En Capraia, no puedes perderte la cala dei Turchi, la cala di Sorrentino y la cala Pietra del Ricile. En Cretaccio, haz una parada en cala del Diavolo, preferiblemente al atardecer.

No es necesario ser un experto para disfrutar de una inmersión en las Islas Tremiti, siempre que te acompañe un guía autorizado. Solo tienes que preguntar en el puerto de San Domino.

Comprobarás que el mar que rodea las islas no solo es bonito en la superficie, sino también en las profundidades. Sumérgete en Punta Secca a 42 metros de profundidad para descubrir dos arcos rocosos poblados por esponjas y peces multicolores. Frente a cala dei Benedettini se encuentran los restos del naufragio de la galera turca de 1566, que puedes explorar.

Cuatro de las cinco islas están lo bastante cerca como para explorarlas remando. Alquila tu kayak en el puerto de San Domino o San Nicola.

Empieza por navegar San Nicolás hacia la izquierda. Observa el escarpado acantilado, el Gargano a lo lejos y la abadía en la cima de la isla. Luego, dirígete a Capraia, donde reinan las gaviotas. En San Domino, dedica un día entero empezando por el acantilado oriental hacia el sur para no perderte ni una sola cueva. Después de pasar el faro, descubre cala delle Rondinelle y cala degli Inglesi y continúa rumbo a Punta del Diamante hacia el norte.

Alquila todo lo que necesitas en el puerto de San Domino y disfruta de la pesca deportiva desde la cima hasta los acantilados de San Domino.

Aquí el mar es generoso, si bien, al ser una zona marina protegida, algunas zonas están vedadas, como Capraia y Pianosa.

El Año Nuevo en las Islas Tremiti será una experiencia inolvidable, en una dimensión íntima junto con los habitantes de las islas.

Todos juntos esperan la llegada del nuevo año en la plaza de San Domino. Muchos hoteles de la isla organizan veladas especiales con cena y música.