Los 6 lugares más bellos de Italia que hay que visitar al menos una vez en la vida

Es un lugar mágico y único, capaz de enamorar a cualquiera que lo visite. El primer impacto con la laguna y sus islas nos deja con la boca abierta, pero al pasear por las calles del centro histórico entre los puentes y canales de Venecia es cuando nos damos cuenta de lo especial que es esta ciudad.

Lugares y símbolos de Venecia como la monumental Plaza de San Marcos, dominada por la Basílica y el imponente campanario, el Puente de los Suspiros y el Puente de Rialto nos entran en el corazón y permanecen allí para siempre. No es casualidad que millones de parejas elijan Venecia para declararse su amor, como destino para una luna de miel o una escapada romántica. Venecia y su laguna son Patrimonio de la UNESCO desde 1987. 

Es una metrópoli cosmopolita siempre atenta a las últimas tendencias en todos los campos, desde la organización de eventos hasta la gastronomía. El descubrimiento de la ciudad debe comenzar por su centro histórico, dominado por el Duomo di Milano con sus características agujas y la Madonnina que vigila toda la ciudad desde 1774. Desde la plaza dominada por el Duomo parte otro de los hitos de la ciudad, la Galería Vittorio Emanuele II, que alberga tiendas y bares y que conduce a los visitantes hasta la Piazza della Scala, sede de la ópera del mismo nombre.

Gracias a un eficaz sistema de transporte local, que incluye metro, tranvía y autobús, desde el centro de Milán se puede llegar en pocos minutos a algunos de los lugares emblemáticos de la ciudad, desde el Castillo Sforzesco hasta la Pinacoteca de Brera. Milán es también una ciudad de compras, en el famoso Cuadrilátero de la Moda y en las tiendas vintage de las Cinque Vie. Para los amantes del arte y la cultura, Milán es la ciudad ideal, con prestigiosas exposiciones y eventos que se van alternando a lo largo del año.

Hermosas playas enclavadas entre rocas escarpadas sobre el mar, encantadores pueblos de variados colores encaramados a los acantilados y maquis mediterráneo por descubrir caminando por sus pintorescos senderos. Pero, ¿qué son las 5 Terre? Nos referimos a los pueblos de Monterosso, Vernazza, Corniglia, Manarola y Riomaggiore, que se suceden a lo largo de la Riviera de La Spezia entre Punta Mesco y Punta di Montenero.

El Parque Nacional de las Cinque Terre puede descubrirse a pie, aprovechando los numerosos senderos que serpentean por todo el territorio, desde el camino Monterosso-Vernazza hasta el Sentiero Azzurro, pasando por la Via dell'Amore. Quienes prefieran descubrir solo algunos de los cinco pueblos pueden usar los trenes regionales que atraviesan Liguria y paran en las cinco estaciones de Cinque Terre. Desde 1997, esta zona figura en la lista de territorios Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. 

El centro histórico de Florencia, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1982, es un tesoro que hay que explorar a pie para no perderse ni una sola de las maravillas que lo hacen tan especial. Es imposible permanecer indiferente ante obras maestras como la Catedral de Santa Maria del Fiore en la Piazza del Duomo, el Palazzo Vecchio en la Plaza della Signoria, y también la Basílica de Santa Maria Novella, la Galería de la Academia y la Basílica de Santa Croce. La ciudad destila arte por todos sus costados y entre los lugares que no debéis perderos, donde quedaréis encantados, está sin duda la Galería degli Uffizi de Florencia, con obras de arte únicas en el mundo.

Quienes visiten Florencia para ver el arte deben dedicar unas horas a descubrir el Palacio Pitti, que alberga en su interior la Galería Palatina, con obras de Rafael y Tiziano, los Apartamentos Reales de la familia Medici y la Galería de Arte Moderno. También es imprescindible darse un paseo hasta el Ponte Vecchio, uno de los símbolos de la ciudad.

El centro histórico de Roma nos garantiza emociones a cada paso: incluye más de 25.000 puntos de interés y ha sido reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Descubrir Roma significa perderse en otros siglos del pasado al visitar perlas de belleza sin igual como el imponente Coliseo y el elegante Panteón, y también la Via de los Foros Imperiales, el Palacio Venezia y el Circo Máximo. Entre los monumentos de Roma más fotografiados por los turistas están la Fontana de Trevi y la Piazza Navona, dominada por la Fontana dei Quattro Fiumi (Fuente de los Cuatro Ríos) diseñada por Gian Lorenzo Bernini.

Dentro de Roma se encuentra también otro de los lugares más conocidos del mundo, la Ciudad del Vaticano, con la majestuosa Basílica de San Pedro y todos los edificios del gobierno de la Santa Sede.

La Costa Amalfitana es otro de los lugares imprescindibles de Italia, un maravilloso sector de costa que va desde Vietri sul Mare hasta Positano, una de las joyas de esta zona. Elegir qué ver en la Costa Amalfitana no es fácil porque cada rincón merece más de una visita, desde ciudades como Amalfi, Ravello, Praiano y Positano[U1]  hasta pequeñas perlas ocultas como la Grotta di Pandora y la Grotta Sulfurea. Las playas de la Costa Amalfitana, caracterizadas por sus piedras y rocas, ofrecen unas experiencias muy sugestivas. Algunas sugerencias: la playa del Duoglio en Amalfi, la bahía de Erchie en Maiori y el Fiordo del Furore.

Este lugar, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997, también es ideal para los amantes del senderismo. El Sentiero degli Dei (Sendero de los Dioses) es uno de los más bellos itinerarios de la Costa Amalfitana, pero también merecen un paseo el Sentiero dei Limoni entre Maiori y Minori y el sendero que une Agerola con el Fiordo di Furore.