San Miniato

San Miniato es un encantador pueblo medieval, distribuido en las cimas de tres colinas, que desde solo 150 metros de altura sobre el mar domina un amplio paisaje, desde la costa hasta los Apeninos de la Toscana. Su ubicación, tanto en el pasado como en la actualidad, siempre ha sido estratégica. Se encuentra a medio camino entre Pisa y Florencia, cerca de la Vía Francígena y del río Arno.

El centro urbano, filiforme, resulta muy variado y pintoresco. En su centro histórico se concentran numerosos puntos de interés, como iglesias, oratorios, edificios históricos o calles cubiertas que se pueden visitar fácilmente a pie. Los que no hay que perderse son:

- la fortaleza de Federico II;

- la plaza y el seminario episcopal;

- el palacio episcopal;

- la catedral de Santa Maria Assunta y de San Genesio en la plaza Prato del Duomo;

- el antiguo monasterio de Santa Chiara.

San Miniato, además de ser una importante ciudad artística, es un punto de referencia económico e industrial del Distrito del Cuero, es una ciudad reconocida por sus sabores y su «slow food» y uno de los lugares de excelencia de Italia para la trufa blanca.

En el campo de este municipio hay algunos cultivos típicos, como el tomate arrugado, la alcachofa, laaceituna «mignola» y la variedad de tabaco Kentucky, utilizado para la producción del cigarro toscano.

Además, en San Miniato se ha originado el «mercatale», el mercado de las producciones agrícolas y artesanales de kilómetro cero.

El pueblo se anima gracias a una comunidad muy activa y a varios acontecimientos culturales durante diferentes periodos del año. La exposición del mercado nacional de la trufa blanca, que se celebra en el centro histórico el segundo, tercer y cuarto fin de semana de noviembre, es uno de los eventos más importantes.