7 casas rurales verdes en Campania, una combinación perfecta de eco-sostenibilidad y sabor

A sólo 9 km de Sorrento, en las colinas de Sant'Agata Sui Due Golfi, se encuentra la Fattoria Terranova. Te deleitará dar un paseo entre olivares, viñedos y campos de cítricos, para después ir al restaurante a cenar.

En cada plato van pasando los productos provenientes de las 6 hectáreas de la finca circundante: son productos típicos de la zona con los que se preparan platos deliciosos. Entremeses de verduras de la huerta, tubettoni (pasta en forma de tubos cortos) con cebolla blanca como primer plato, seguido de bacalao con guarnición de escarola. Terminamos con un babà (dulce esponjoso en forma de corona) mientras bebemos limoncello, elaborado con la fruta de la Costa Amalfitana.

Para disfrutar de una experiencia completa, podrás pasar la noche aquí, en sus preciosas habitaciones, y participar en una clase de cocina local, organizada in situ. Tu emoción será plena. 

Se encuentra también en la península de Sorrento, entre el mar y el campo, donde la familia propietaria cultiva desde hace generaciones aceitunas, limones, uvas y hortalizas.

Acomódate bajo las pérgolas con vistas al mar, para apreciar su clima suave incluso en las estaciones intermedias, y prueba las trenzas de mozzarella, los tomates cherry de la huerta y el pan con un aceite excelente, productos típicos de Campania. En tu copa te servirán vino de producción propia, así como licores a base de cítricos o arándanos. Merece la pena dormir aquí porque el despertar es realmente agradable: te espera un desayuno rico en pasteles y perfumadas mermeladas caseras. 

En un circuito por el Cilento, esta es una parada imprescindible. Te alojarás en los apartamentos rústicos rodeados de vegetación y degustarás las especialidades de su restaurante, donde los productos utilizados tienen que viajar muy poco: desde la finca de cultivo biológico de la familia pasan directamente a tu plato.

También puedes ir simplemente a comprar aceitunas "ammaccate" (escachadas) y el queso cacioricotta, ambos Slow Food, junto con el fiambre culatello, en adobo, mermeladas y su aceite de oliva virgen extra.

El huerto y el restaurante, estrechamente interconectados, son los dos buques insignia de Fontana Madonna en la Alta Irpinia, en la zona verde del mismo nombre. La autenticidad del sabor y los métodos de cultivo tradicionales caracterizan la producción de su preciado aceite de oliva, los garbanzos y las habas, el pimiento picante "quaglietto" y los tomates madurados por el sol.

En la mesa, pide cicatielli, la pasta tradicional hecha a mano, y el codillo de cerdo. Después puedes descansar en una de las pocas habitaciones.

Lujo en versión ecológica, tradición rural y bienestar de vanguardia. Todo esto lo encontrarás en la zona de Salerno, en un oasis de San Gregorio Magno. El spa ofrece un rico menú de tratamientos disponibles, pero es obligatorio ir a la piscina de agua salada biológica que purifica la piel, sin la agresividad del cloro, y que te aporta una magnífica relajación.

La Sfruscià es también una finca agrícola y muchos de sus productos se usan en el restaurante. Prueba los cavatelli (pasta en forma de vaina) con salsa de carne, o la menestra maritata (sopa de verduras y carne), cordero y patatas de montaña, mientras bebes tintos fuertes: Aglianico y Nero d'Avola.

En la comarca de Avellino se encuentra esta propiedad que promueve la agricultura sostenible y protege la biodiversidad. De hecho, la finca ha plantado especies locales antiguas: 40 variedades de manzanos, perales, higueras y cerezos en peligro de extinción, así como dos razas locales, la raza ovina Laticauda y la raza caprina Valfortorina.

Tus vacaciones verdes van a constituir también un conocimiento en profundidad sobre estas rarezas salvadas del olvido. Puedes dar un paseo por las colinas en las 25 hectáreas de la finca, admirar los olivos y el huerto, para después degustar el pan casero con hierbas aromáticas silvestres, para aderezarlo con el aceite de oliva virgen extra de Ravece. No olvides probar también el zeppole al romero y el conejo de la granja. Los 4 dormitorios están esperándote.

Hay un lugar en la Costa Amalfitana donde todo es ecológico. Las cuatro habitaciones donde puedes pernoctar huelen a madera de castaño y están amuebladas con muebles de la familia del siglo XIX, siguiendo la filosofía de reutilización creativa. Aquí no hay restaurante, pero el desayuno es tan rústico como suntuoso, con quesos y embutidos, pasteles y mermeladas caseras.

Este es el lugar adecuado para los amantes de vacaciones dinámicas en la naturaleza, ya que contarás con un equipo de guías de senderismo que te acompañarán por los senderos de la costa a realizar excursiones panorámicas. Antes de despedirte, compra las joyas gourmet: azafrán, orégano y tomates.

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