Coreglia Antelminelli

Coreglia, pueblo de frontera de la Lucca medieval, contiene su historia como tierra de paso en la etimología de su nombre, que deriva de la palabra latina "Corrilia", que significa "tierra de desplazamiento". Pueblo amado por pintores, poetas y hombres de letras por el encantador paisaje en el que está inmerso, acoge a los visitantes con sus antiguas iglesias, sus históricos palacios y, sobre todo, con un museo que relata lo que hizo famoso a este pueblo en todo el mundo: la figura de yeso. De hecho, Coreglia es conocida por la actividad de sus figureros, que ya era importante en el siglo XVIII y luego se intensificó aún más, hasta el punto de que muchos artesanos de este pueblo se instalaron en las principales ciudades italianas, así como en las alemanas, francesas, suizas, inglesas y suecas, donde este arte suyo era muy demandado. Una curiosidad: entre las piezas más particulares del museo se encuentran unos gatos del siglo XVIII coloreados con el humo de las velas y un gran belén de finales del siglo XIX.