Saltar el menú

Museo de San Caprasio

Resumen

Corría el año 884 cuando, en la región de Val di Magra, donde se encuentran el río Magra y su afluente, el Aulella, Adalberto de Toscana fundó una iglesia y le anexionó un monasterio. La peculiar geografía ha influido históricamente en los acontecimientos y en este cruce de grandes vías de comunicación del norte y del paso transversal de los Apeninos. De este modo, ayudó a consolidar la posición de un rico señor que, además de construir un castillo, un hospital, casas y almacenes, deseaba la presencia espiritual de un monasterio confiado a los monjes de san Benito, dotado de numerosos privilegios y posesiones. El hijo de Adalberto, Adalberto II, casado con Berta de Provenza, llevó a la abadía de la familia las reliquias de san Caprasio, guía espiritual de la más antigua e importante comunidad monástica de Occidente, situada en las islas de Lérins. Hasta principios del siglo XIII, la abadía estuvo gobernada por poderosos abades que durante años trataron de preservar su independencia del obispo de Luni. En el siglo XVI se convirtió en encomienda secular de los marqueses Centurione y durante el siglo XVIII pasó a manos de los Malaspina, que hasta principios del siglo XIX se reservaron el privilegio de nombrar al párroco. Los edificios resultaron gravemente afectados por los bombardeos aliados de 1943-45, pero gracias a las recientes restauraciones es posible visitar el lugar y degustar una historia con un sabor milenario.
Museo de San Caprasio
Piazza Abbazia, 54011 Aulla MS, Italia
Página web
¡Ups! Hubo un error al compartir. Acepta las cookies de perfil para compartir esta página.