Escalada libre en Cerdeña
2 minutos
Costas rocosas junto al mar, recorridos que se elevan en medio de la vegetación mediterránea, acantilados que se asoman a playas de intensos colores y aguas cristalinas: Cerdeña con sus salvajes paisajes interiores y sus espectaculares vistas panorámicas, es conocida desde hace tiempo como uno de los destinos más fascinantes para los amantes de la escalada. Gracias a su clima templado, la isla ofrece a los deportistas la posibilidad de escalar durante todo el año y, a partir de la entrada la primavera, conjugar unas vacaciones en el mar con unas vacaciones deportivas. Cala Gonone, en la zona de Nuoro; Jerzu, en la provincia de Ogliastra; Isili, en la de Cagliari; Supramonte en la parte centroriental y el Iglesiente en la suroccidental de la isla, son sólo algunas de la etapas que no pueden faltar si se quiere explorar Cerdeña a lo largo y alto de sus paredes de roca. Hay paredes equipadas por toda la isla y últimamente se están añadiendo zonas como la de Sassari y Alghero. Se trata de recorridos tendencialmente bien equipados y controlados periódicamente, descubiertos y valorizados inicialmente por los deportistas sardos y, en la actualidad, provenientes de toda Europa.
Un itinerario emocionante
Imaginando un recorrido desde la parte septentrional a la meridional, el que llega a Olbia, podrá escalar enseguida los bellísimos acantilados de la zona de Cala Gonone.
Biddiriscottai es un elevado escollo con una gruta, caracterizado por la afilada piedra caliza roja, al que se llega a través de un sendero de unos quince minutos que permite combinar playa y roca.
Más al sur se encuentra lo que muchos definen el paraíso de los escaladores.
La zona de Baunei es una perla natural en la provincia de Ogliastra, salpicada de rocas calizas y caracterizada por unas paredes ideales incluso para el que quiere empezar, para los amantes del trekking hay que citar “Selvaggio Blu”, un sendero de siete etapas considerado por algunos “el trekking más difícil de Italia”. Selvaggio Blu presenta efectivamente algunas dificultades, tanto por la ausencia de agua en algunos tramos, como por la longitud que prevé un itinerario completo de siete días, pero naturalmente se puede realizar sólo parcialmente, gracias a la ayuda de las guías, incluso con toda la familia y de este modo descubrir los lugares de los antiguos “carbonai” (carboneros) y pastores, entre el mar y la montaña.
No hay que perderse, también en Baunei, el obelisco natural de Aguglia que preside la playa de Goloritzé y, permaneciendo en la provincia de Ogliastra, la zona de Jerzu y su paisaje de monolitos que se elevan, solemnes, ofreciendo la posibilidad de una escalada difícil pero emocionante.
Entre acantilados y nuragas
Descendiendo y desplazándonos hacia el oeste nos encontramos con Domusnovas e Iglesias, donde en menos de 30 minutos se escalan rocas que dan al mar como el acantilado de Masua, el Wild Cadapria o los Torrioni di Masua, donde se pueden llevar a cabo escaladas adecuadas para todos, desde principiantes a los más expertos.
Para concluir, no se puede dejar de mencionar el territorio de Isili, en la provincia de Cagliari, que alberga más de 300 de vías ferratas. Maravillosas rocas que atraen a los mejores escaladores de toda Europa por la dificultad de los acantilados que se elevan entre estrechas golas, como cañones. Un paisaje natural que, como en toda Cerdeña, refleja su antigua historia y que, en lo que respecta a Isili, permite visitar uno paisaje sembrado de nuragas, como el Nuraga Is Paras, uno de los mejor conservados del territorio.