Entre vino y paisajes patrimonio de la UNESCO
La riqueza y la singularidad del vino italiano son conocidas en todo el mundo. Basta pensar que algunas zonas de producción han obtenido el reconocimiento de Patrimonio de la UNESCO. Como los Paisajes Vitivinícolas de Piamonte, Langhe-Roero y Monferrato; las Colinas del Prosecco de Conegliano y Valdobbiadene y las vides cabeza de pulpo de Pantelleria. Pero, en realidad, en Italia cada rincón ofrece increíbles oportunidades para degustar productos excepcionales.
Experiencias imperdibles
Italia está llena de viñedos: de norte a sur, el territorio está lleno de hileras, cada una con su característica distintiva, absolutamente por descubrir.
Puedes tener experiencias únicas y al alcance de todos. Además de los clásicos tours de degustación en bodega, se suman las estadías en Wine Resorts y los tratamientos de bienestar de vinoterapia. Los entusiastas del yoga pueden meditar inmersos en la naturaleza, a la sombra de una vid. Para aquellos más inclinados a unas vacaciones activas, pueden explorar los viñedos a bordo de un 4x4, combinando así la emoción del todoterreno con los maravillosos paisajes.
Bodegas y sostenibilidad
Y si los viajeros se sienten cada vez más atraídos por los destinos ecológicos, la industria vinícola italiana está al día en la materia: desde hace años se apuesta por la sostenibilidad medioambiental, gracias al uso de energías renovables, materiales de bajo impacto en el ecosistema y gestión de residuos. Esto ayuda al desarrollo del territorio italiano y mejora la calidad del producto, que supera la excelencia.