Toscana: descubriendo 4 bodegas de diseño
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Cuando se habla de la Toscana, no se puede dejar de lado el vino, producido en algunas de las mejores bodegas del mundo.
Estos sitios, de encanto tradicional, han evolucionado a lo largo de los años y hoy son destinos cada vez más demandados por el turismo internacional, para vivir una experiencia que va más allá de la degustación.
De algunas bodegas toscanas, se puede admirar la arquitectura, clásica y moderna, y disfrutar de la belleza de estos lugares.
A continuación, te traemos una selección de las 4 bodegas que no debes perderte.
Las vidrieras de Caiarossa
Se encuentra en Riparbella y es fácil de reconocer por sus grandes vidrieras y el rojo intenso con el que se ha pintado su exterior.
El diseño arquitectónico de esta bodega está inspirado en los estudios de geodinámica y en los principios del Feng Shui, influyendo en su forma, materiales, colores y exposición.
El suelo de esta zona está en pendiente: esto permitió a los arquitectos desarrollar la estructura en cuatro niveles, lo que permite la vinificación "en caída", utilizando únicamente la fuerza de la gravedad. Se trata de una verdadera técnica de vinificación que evita que las uvas sean alteradas mecánicamente, lo que permite a la bodega crear productos únicos en términos de sabor y calidad.
Antinori, el hogar del Chianti
Desde sus terrazas con vistas al campo se puede disfrutar de una vista espectacular del viñedo, cultivado sobre todo en Sangiovese.
La bodega Antinori está situada en la región de Chianti Classico, a medio camino entre Florencia y Siena, y cuenta con una arquitectura realmente espectacular, diseñada para tener un bajo impacto medioambiental y un gran ahorro energético.
Desde el exterior, es prácticamente invisible, sino por dos largas "grietas" horizontales que atraviesan la colina: es un verdadero experimento geomorfológico cuyo rasgo distintivo es la pintoresca escalera de caracol que conecta las 3 plantas de la estructura.
En el Borro, que inspiró a Leonardo da Vinci
Cuenta la leyenda que el paisaje que rodea al Borro inspiró a Leonardo da Vinci mientras pintaba la Mona Lisa. Situada en la campiña del Valdarno y propiedad de la famosa familia Ferragamo, la bodega cuenta con un edificio construido en ladrillo con una disposición tradicional que se integra en el estilo rural del pueblo medieval de la finca.
Cuando visites esta bodega, comienza por la Galería Vino&Arte, un espacio que alberga la colección privada de grabados de Ferruccio Ferragamo dedicada al vino y sus representaciones.
Las catas se realizan en bodegas situadas a 8 metros de profundidad.
Petra, única en su género
El ecosistema de la bodega es único. Se trata de un oasis natural de 300 hectáreas, que incluye el cinturón verde de Colline Metallifere, el Parque de Montioni, la Reserva de Poggio Tre Cancelli y el Parque de Sterpaia, con vistas al mar Tirreno.
Aquí se encuentra Petra, un espectacular edificio que se asemeja a un palacio totémico, en el que el cuerpo cilíndrico central tiene 25 metros de altura y está orientado a 45/90 grados con respecto a las filas que lo rodean.