Parque Nacional de los Dolomitas de Belluno

Los visitantes del parque tienen a su disposición cientos de senderos, caminos forestales, caminos de herradura y vías ferratas. Hay senderos para todos los niveles y preparaciones: desde los aptos para todo el mundo hasta las rutas para los montañeros más experimentados. De hecho, muchos son recorridos circulares dedicados no tanto a los excursionistas experimentados, sino a los visitantes curiosos por descubrir de cerca la vida animal y vegetal de la zona. Uno de los más populares, de solo 4 km, es el sendero de Val Falcina, que atraviesa el curso del torrente Mis. La señalización que se encuentra a lo largo de las distintas rutas del parque proporciona información geológica, botánica y faunística, lo que convierte cada paseo en una oportunidad para aprender más. Por supuesto, hay rutas dedicadas a los amantes de las dos ruedas, entre el campo y las paredes rocosas, como la ruta de Val di San Martino, pero también caminos para los que optan por desplazarse a caballo, partiendo de Prati di Salet, una ruta corta y llana desde el pueblo de San Gottardo, hasta el centro de cría de caballos del Corpo Forestale dello Stato.

Las alturas variables, la presencia constante de corrientes y una escenografía sin igual son algunas de las características del parque que atraen a los amantes del vuelo libre. No es casualidad que el proyecto Dolomiti Fly se haya creado con el objetivo de coordinar todas las disciplinas que ofrecen experiencias de vuelo (desde el ala delta hasta el parapente) para formular ofertas a medida para los visitantes, incluyendo alojamiento y restaurantes. Aunque nos encontremos en un parque de montaña, la natación es uno de los deportes "estrella" en los Dolomitas de Belluno. De hecho, las piscinas de estos parajes (en Pedavena y Santa Giustina)acogen campos de entrenamiento de prestigiosos equipos de natación y otros deportes acuáticos, como el waterpolo y el triatlón. Cuando el parque comienza a teñirse de blanco, además de la nieve hay muchas experiencias para los amantes de los deportes de invierno. Hay varias estaciones de esquí (donde practicar patinaje, snowboard, esquí de travesía y más) en el parque y sus alrededores.

En colaboración con la Associazione Italiana Persone Down (Asociación Italiana de Personas con Síndrome de Down), el parque ofrece excursiones guiadas y talleres de interpretación del entorno en zonas accesibles para las personas con discapacidad: las actividades se desarrollan específicamente para las personas con discapacidad (según las distintas discapacidades) y para las personas con síndrome de Down, pero se proponen a todo el mundo para acercarse a la realidad que viven a diario las personas con discapacidad. En los 15 municipios del parque también hay numerosos museos dedicados a la historia, el arte y la cultura locales. Muy diferentes entre sí en cuanto a tamaño, organización y valor de las colecciones expuestas, estos lugares tienen el mérito de permitirte descubrir aspectos peculiares, en la mayoría de los casos poco conocidos, de las muchas almas del parque. En los Dolomitas de Belluno también te esperan un jardín botánico, un centro de educación ambiental y un museo de la naturaleza. Disponibles tanto para los turistas como para los residentes, cada una de estas realidades representa un lugar de intercambio y confrontación cultural. En Belluno también se encuentra el Museo Etnografico del Parco, que se divide en exposiciones permanentes y temporales relacionadas con la vida del hombre en la montaña, con muestras que también utilizan soportes multimedia, mientras que Val Canzoi alberga el Centro de Educación Ambiental La Santina.

Hay muchas cosas que ver en el parque: los pueblos alpinos y los centros históricos, las iglesias y las fortificaciones de la Edad Media ofrecen muchas oportunidades para los amantes de la historia y la arquitectura. Entre los edificios típicos que encontrarás en el parque están las "Casere a gradoni", graneros aislados con fachada escalonada (conocidos localmente como "scalinèle"), un tipo de construcción rara de origen antiguo, de gran valor histórico y medioambiental. La sugestiva Casera a Orza de Sovramonte se encuentra en un claro de la pradera en una ligera pendiente, dentro del "cinturón boscoso", a 1100 metros de altitud. Por último, la Cartuja de Vedana en el municipio de Sospirolo: en posición dominante respecto a la "masiere" homónima, es un complejo cuya construcción se inició en la segunda mitad del siglo XV. El emplazamiento, con su excelente paisaje, refleja la necesidad de soledad que requería la Orden de los Cartujos, que ordenó su construcción. El organismo arquitectónico refleja las peculiaridades y ambientes agregados que caracterizan a los monasterios cartujos, estructurados para permitir el respeto de las estrictas reglas de los monjes que vivían aquí en un aislamiento estricto.

La principal actividad económica local está vinculada a la ganadería salvaje y semisalvaje, pero también a la ganadería ovina y caprina. Por ello, la mayor parte de los sabores del parque corresponden al queso, la carne y los embutidos. Con el fin de preservar los entornos y procesos tradicionales, las autoridades del parque han invertido sumas considerables en la renovación de 5 "malghe" (cabañas de pastores), relanzando la producción de queso de montaña. También hay numerosos productores locales de miel de montaña y aún sobreviven cultivos raros (como la famosa judía de Lamon), variedades olvidadas de manzanas o las nueces y castañas de Feltre, famosas por el dulzor y la harinosidad de su pasta compacta y resistente a la cocción.

Pequeñas casas rodeadas de vegetación: esta es la principal forma de hospitalidad del Parque. Despertarse por la mañana inmerso en la tranquilidad de las montañas, rodeado de los miles de matices que solo la naturaleza salvaje puede ofrecer en cada estación. Para satisfacer las expectativas más diversas, también puedes alojarte en hoteles, B&B, cámpines y albergues. También hay seis refugios del Club Alpino Italiano en el parque para los excursionistas. Varios vivacs desatendidos, mantenidos por la CAI o por asociaciones locales de senderismo, completan la oferta. Los centros de visitantes y las oficinas del parque proporcionan información detallada sobre la apertura de los vivacs y sobre cómo acceder a ellos y utilizarlos.

Hay tres centros de visitantes pensados tanto para los turistas como para los residentes y están situados en tres zonas diferentes del parque: en Pedavena, en la zona de Feltrino, en Belluno y en el yacimiento minero de Valle Imperina, en la zona de Agordino. Para satisfacer mejor las diferentes necesidades de cada viajero, cada centro tiene su propia especialización. El centro de visitantes de Pedavena está especializado en el viaje interior para descubrir las motivaciones éticas de la conservación de la naturaleza; el de Valle Imperina se centra en los hombres de las minas, los silleros y el legendario hombre salvaje. Por último, el centro de Belluno tiene un carácter más general y abarca todo el territorio del Parque.