Verano en la Lombardía: 4 ideas para todos los gustos

Si buscas relajarte, te aconsejamos las localidades lacustres: inmersas en la naturaleza, rodeadas de pueblos característicos, cuentan con zonas de baño y paseos poco exigentes. La Lombardía tiene mucho para elegir: un corolario de pequeños lagos en el que destacan los más famosos, desde el lago de Como al de Iseo, desde el lago Maggiore al de Garda. En cada uno, se pueden vivir agradables jornadas en armonía con ellos y con el paisaje que los rodea, que se pueden recorrer de una orilla a otra gracias a los paseos en barco.

El verano en la Lombardía también es ideal para los amantes del ejercicio. Los lagos permiten la práctica del buceo, la vela y el piragüismo. A ellas se suman las propuestas de tierra firme, como los paseos a caballo por paisajes panorámicos, o las rutas cicloturistas que permiten explorar sobre dos ruedas rincones muy diferentes. Si buscas una actividad más adrenalínica, puedes probar el parapente.

Si eres uno de esos turistas que no soportan las temperaturas cálidas, te recomendamos optar por la montaña. La Lombardía es rica de parques regionales (hay 25, para ser exactos), las zonas alpinas de Valtellina y Val Camonica ofrecen la oportunidad de refrescarse con caminatas por densos bosques, picnics a la sombra de los castaños, y senderismo con paradas a lo largo de frescos ríos. También hay un clima agradable en los jardines de las numerosas villas históricas, abiertos al público en la temporada de verano.

¿Tu amor por el arte es incontenible incluso en vacaciones? No hay problema. La Lombardía está repleta de eventos. No hay que perderse el itinerante por las 11 capitales lombardas, conocido como Cult City: un recorrido por las ciudades más fascinantes de la región, descubriendo sus riquezas y oportunidades.