Farnese

Inmerso en un fascinante entorno paisajístico, a pocos kilómetros de la frontera entre Lacio y Toscana, el pueblo medieval de Farnese vincula su historia y arquitectura a la dinastía del mismo nombre de comandantes militares y clérigos, originaria de este territorio.

El nombre del pueblo, y en consecuencia de la casa de los Farnesio, deriva de los bosques de «farnie» (una variedad de roble) que rodean la localidad. Este tipo de árbol también figura orgulloso en el escudo municipal, que decora las calles y los monumentos de la ciudad: para profundizar en el papel que la familia de los Farnesio desempeñó en el desarrollo artístico del pueblo, se pueden visitar las iglesias de Santa Maria della Neve y del Santissimo Salvatore, ricas en obras de arte.

Como sucede a menudo con los asentamientos de Tuscia, Farnese también se encuentra sobre un inexpugnable acantilado de toba, un material volcánico típico de este territorio utilizado para construir la mayoría de los edificios. La peculiaridad medieval de este pueblo decantó al director Luigi Comencini para filmar en Farnese algunas escenas de Las aventuras de Pinocho (1972), una adaptación televisiva de la famosa novela de Carlo Collodi.