Aviano

En la carretera entre Polcenigo y Maniago, la ciudad recuerda con su nombre sobre todo a la base militar de la OTAN, que se encuentra en el aeropuerto local desde los años 50 del siglo XX. La catedral del siglo XVIII, dedicada a San Zenón, es un edificio neoclásico con notables lienzos del siglo XVI, mientras que entre los edificios históricos civiles destaca, en la misma plaza, el palacio Menegozzi, con las estatuas que coronan la fachada.

La historia del asentamiento había comenzado más al sur, en lo que ahora es la aldea de Castello d’Aviano. El nombre deriva obviamente de un castillo, sede de los Patriarcas de Aquilea desde antes del año 1000, pero que hoy es poco más que una ruina. En cambio, están completamente intactos los frescos de finales del siglo XV en la iglesia de S. Gregorio, a los pies del pueblo, a lo largo del camino que lleva al ferrocarril, y los del siglo XIV en la parroquia de Santa Giuliana.

Desde Aviano, una carretera panorámica sube por curvas de más de 1200 metros de altitud hasta la meseta de Piancavallo. Aquí, los pastos alpinos de siglos pasados han dado paso a una estación de esquí, muy popular también porque se llega rápidamente desde las llanuras. Cuando hace buen tiempo, la zona es perfecta para pasear por prados y bosques, montar en bicicleta de montaña e incluso escalar, sin olvidar la presencia de un parque de aventuras entre hayas. La meseta está involucrada en los espectáculos del Festival internazionale del Folklore, organizado cada mes de agosto por la Pro Loco de Aviano: sus eventos se celebran en numerosos centros de la provincia.