Biblioteca Classense

La institución de Rávena ha recogido la herencia manuscrita e impresa de la ciudad. Liquidadas las órdenes religiosas y su patrimonio en 1798 por Napoleón, la Classense se convirtió en biblioteca cívica unos años más tarde, tomando su nombre de la biblioteca de los monjes camaldulenses que había sido trasladada aquí desde la abadía de Classe; también se hizo cargo de los fondos de las bibliotecas del resto de grandes cenobios. Entre los fondos más importantes había y hay códices, incunables, ediciones impresas de gran valor, autógrafos, manuscritos musicales, cartas, dibujos, xilografías, grabados en cobre y litografías.

Entre los fondos especiales adquiridos posteriormente destacan el del arquitecto del siglo XVIII Camillo Morigia, el constructor de la tumba de Dante, y la Colección Dantesca, reunida por el bibliófilo y editor Leo Olschki, la colección más completa de ediciones raras centrada en la obra de Dante.

Otra interesante iniciativa alrededor del poeta que podrás encontrar al recorrer la ciudad es Caminar por Rávena con la Divina Comedia, un proyecto de los Lions Clubs locales. Se han colocado cien placas en las calles, cada una dedicada a un canto de la «Divina Comedia» (no necesariamente en lugares específicamente relacionados con la memoria de Dante). Cada placa tiene un código QR, a través del cual se puede consultar el texto del canto, escucharlo recitado y encontrarlo enmarcado en la cosmología dantesca, así como tener disponible el resumen y una síntesis.