Resumen
Situada en la confluencia de las dos carreteras que conducen a los puertos alpinos de Moncenisio y Monginevro, encrucijada de rutas transalpinas entre Italia y Francia desde hace milenios, la ciudad de Susa -en el centro del valle del mismo nombre- es rica en monumentos romanos y medievales. En la antigüedad, fue la capital del Reino de los Cozios, punto de partida de la Vía Domitia y de la Vía Cozia, y lugar de paso del Itinerarium burdigalense y de la Vía Francigena. Los monumentos más importantes del parque arqueológico datan de la época romana: el Arco de Augusto, la Puerta de Saboya, el acueducto y el anfiteatro. El castillo medieval de la Condesa Adelaida domina desde lo alto de la colina y hoy alberga el Museo Cívico. Entre las iglesias se encuentran la imponente Catedral de San Giusto, la Iglesia de San Francisco y la Iglesia del Puente, sede del Museo Diocesano de Arte Religioso Alpino.
