Sassocorvaro

Un milenio después del nacimiento de Sassocorvaro, llega a Montefeltro la resistencia, no armada, estamos a finales de los años 30 del siglo XX, sino cultural. El Ministerio de Educación encarga al superintendente Pasquale Rotondi que identifique y proteja el mayor número posible de obras de arte italianas de los riesgos de la guerra mundial, que está a punto de estallar.

Rotondi piensa inicialmente en Urbino, pero descarta la idea porque en la capital hay un importante depósito militar que podría ser bombardeado. En cambio, elige la fortaleza Ubaldinesca de Sassocorvaro, elegante pero sobre todo muy robusta creación arquitectónica de finales del siglo XV, obra de Francesco di Giorgio Martini. Será, en palabras del propio Rotondi, «la agrupación de obras de arte más importante jamás realizada en el mundo». Desde Venecia, Urbino, Pésaro, Fano, Ancona, Lagosta, Fabriano, Iesi, Osimo, Macerata, Fermo, Senigallia y Ascoli Piceno llegan a Sassocorvaro casi diez mil obras de, entre otros, Giorgione, Giovanni Bellini, Piero della Francesca, Paolo Uccello, Tiziano, Carlo Crivelli, Carpaccio, Mantegna y Rafael. Si todavía existen, es gracias a Rotondi y a Sassocorvaro. Estos hechos fueron objeto de una gran exposición en el Quirinal, en Roma, entre 2022 y 2023, pero permanece documentada en la misma fortaleza de Sassocorvaro en las salas de la exposición «L'Arca dell'Arte» (El arca del arte).

Además de la pinacoteca que alberga la fortaleza, Ubaldinesca porque fue donada por Federico da Montefeltro a su medio hermano Ottaviano degli Ubaldini, también hay que rendir homenaje en el pueblo a la colegiata y a sus magníficas vistas. Al fin y al cabo, estamos en el «centinela de Montefeltro».