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Deporte
Umbría

Umbría, aventuras entre los rápidos

El rafting y Umbría son una combinación perfecta para quien busca una aventura llena de adrenalina en plena naturaleza.

2 minutos

En el Parque Nacional de los Montes Sibilinos, el escenario natural para practicar esta disciplina es casi perfecto, gracias al encuentro de los ríos Velino y Nera que, según el mito, fueron dos amantes de cuyo amor atormentado e interminable nacerían las cascadas de Marmore, entre las más altas de Europa.

La diversión está asegurada con los trampolines naturales, que invitan a tirarse.

Remar con vistas a los montes Sibillinos

Tras llegar a Biselli di Norcia o Serravalle di Norcia, en Valnerina, comienza la aventura a través del río Corno. Solo hay que cumplir dos requisitos: saber nadar y no superar los 100 kilos. El curso de agua natural es un afluente del río Nera: recomendamos lanzarse a explorar su recorrido con guías especializadas.

En el parque fluvial del río Nera, el rafting puede ser la primera de una serie de experiencias deportivas en la zona, que van desde la canoa neumática hasta el hidrospeed y el barranquismo. Si tus vacaciones son un poco más largas y vienes con los niños, puedes ir al parque de aventuras con puente tibetano, o volver al pasado con una excursión en burro.

Otra posibilidad podría ser llegar a la Val Castoriana y al Parque Nacional de los Montes Sibilinos, para explorar la vegetación virgen con un relajante paseo. ¿Te gustan los animales y no puedes verlos en la naturaleza? Acércate al centro de animales dedicado a ciervos y rebecos, dentro de la misma zona verde. 

Volando bajo la cascada

Volvamos al rafting: la emoción de estar a los pies de la cascada de Marmore y su increíble paisaje no es algo habitual.

En este área hay un centro bien equipado que te permitirá desafiar al río Nera, particularmente bravo en la zona. Aquí fluye muy rápido durante casi tres kilómetros y, en algunos puntos, parece que se ven remolinos burbujeantes entre las rocas. En una escala del 1 al 6, los rápidos son de cuarto grado, por lo que resultan bastante desafiantes, pero si consideras que el destino está a poco más de una hora de Roma y bien comunicado, puedes volver varias veces y "practicar".

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