Qué se necesita para usar raquetas de nieve: 5 consejos útiles
4 minutos
Si te gustan las vacaciones en la nieve pero el esquí no es lo tuyo, las raquetas de nieve pueden ser una opción alternativa o, al menos, una diversión a probar durante tu próxima escapada a las increíbles montañas italianas. Quién sabe, tal vez esta actividad se convierta en una verdadera pasión para ti.
En esta guía te informamos sobre lo que necesitas para hacer raquetas de nieve y qué debes hacer para evitar estar mal preparado, tanto físicamente como la ropa que debes llevar y el equipo necesario.
Cómo vestirse para hacer raquetas de nieve
Las raquetas de nieve requieren un mínimo de preparación física: se trata de una auténtica caminata sobre la nieve, solo que en lugar de llevar simples botas, se utilizan raquetas.
Si estás acostumbrado a caminar o, en todo caso, a realizar un mínimo de actividad física, no tendrás ningún problema; para los más perezosos, en cambio, les recomendamos un comienzo suave, teniendo en cuenta lo que pesan también la ropa para raquetas más las propias raquetas, por lo que inevitablemente te vas a sentir más cansado.
La chaqueta y el pantalón son los mismos que para el traje de esquí o de snowboard, las botas, en cambio, deben ir equipadas con un armazón, para que se puedan acoplar directamente a las raquetas de nieve.
Está prohibido usar para este fin las botas de descanso que se llevan después de esquiar, incluso las más modernas; es necesaria una bota sólida que se ajuste bien al pie. ¿Un consejo? Adquiere una bota de una talla más grande al menos de la que uses habitualmente, porque tendrás que llevar calcetines gruesos y también porque tus pies has de moverlos sobre la nieve: este es el secreto para no sentir demasiado frío. Antes de usar las raquetas, si lo deseas, puedes ponerte polainas impermeables, para evitar el riesgo de mojarte los pies: lo peor que puede ocurrir en la montaña.
Cómo ponerse y utilizar las raquetas de nieve
Las botas y las raquetas pueden comprarse o alquilarse en la estación de esquí donde vayas a practicar esta actividad. Si es tu primera vez, puede que necesites un guía, pero aunque no lo tengas, aquí te explicamos cómo ponerte y usar las raquetas.
Para poder caminar con facilidad con raquetas de nieve, ponérselas es fácil: se fijan a las botas con correas ajustables. Introduce primero la puntera y aprieta la correa, después mete el talón y ajusta el cierre según la longitud del pie, luego ata las correas traseras. Existen también modelos con la parte posterior fija y la frontal ajustable, pero no cambia nada a nivel de ajuste o practicidad.
Qué bastones utilizar para raquetas de nieve
Algunos los usan y otros no, pero los bastones para raquetas de nieve son muy útiles. Te ayudarán a soportar el peso de las piernas y a tener un mejor equilibrio, especialmente en descensos, y también permiten que participen los músculos de los brazos en la actividad física.
Pero, ¿qué bastones para raquetas se deben utilizar? Hay diferentes tipos en el mercado, para todos los gustos. Fabricados en material sintético, ligeros y resistentes, encontrarás tanto bastones fijos como ajustables.
Si eliges los primeros, debes cogerlos en proporción a tu estatura, teniendo en cuenta los centímetros extra que dan las botas y las raquetas. Si, por el contrario, eliges los <adaptables, te serán mucho más prácticos, incluso para guardarlos cuando no los uses.
El extremo del bastón debe ser siempre puntiagudo, para que pueda hincarse en el suelo; elige bastones equipados con arandela, similar a la de los bastones de esquí: se fija a unos centímetros del extremo y permite que el bastón no se hunda demasiado.
La mochila perfecta para raquetas de nieve
Una andada por la nieve no es un maratón. Habrá momentos en los que te apetezca detenerte a hacer una foto, descansar en un refugio de montaña o simplemente admirar las vistas. Por eso es imprescindible que lleves una mochila, que guarde tus pequeños objetos esenciales, pero también es indispensable para guardar las raquetas.
Pero, ¿cómo atar las raquetas a la mochila? Hay diferentes sistemas. Algunos se limitan a llevarlas por fuera, lo que viene bien para ahorrar espacio en el interior y mantener el resto de los objetos secos, pero otros aprovechan los bolsillos de malla situados por fuera de la mochila. En este caso, tendrás que guardar las raquetas en vertical, una encima de la otra. Antes de colocarlas en su sitio, átalas entre sí con una goma elástica, haciendo coincidir las superficies dentadas. También puedes comprarte una bolsa para raquetas, que a menudo va con ellas al comprarlas.
Sea cual sea tu elección, evita empezar el paseo con sobrecarga. Caminar por la nieve es agotador, y hacerlo con raquetas aún más: llevar demasiado peso molesta mucho.
Raquetas de nieve y crampones: diferencias
Los menos experimentados pueden tener esta duda: ¿son mejores las raquetas o los crampones? De hecho, son dos cosas completamente distintas, que no sirven para lo mismo.
Las raquetas se utilizan sobre nieve fresca y en terrenos con poca pendiente porque permiten caminar sin hundirse en la nieve.
Los crampones, en cambio, se enganchan a las botas para evitar resbalar. Forman parte, por ejemplo, del equipo de los alpinistas, imprescindibles para crear agarre al hielo, así como sobre nieve dura y muy compacta. Lo ideal es llevar ambos en la mochila, para estar preparado ante cualquier tipo de terreno.
Antes de salir, no hace falta que te digamos que debes informarte bien de la ruta que vas a seguir, sin omitir ningún detalle. Tu seguridad debe ser siempre lo primero.
¡A divertirse en la nieve!